Estudio Bíblico: Cuaresma 1 (B) – 2024

LCR: Génesis 9:8-17; Salmo 25:1-9; 1 Pedro 3:18-22; Marcos 1:9-15

Génesis 9:8-17

La interacción entre Dios y Noé se despliega en una escala vasta e íntima al mismo tiempo. A través de ella, se nos recuerda la inmensidad de la Creación y la multiplicidad de la vida que la habita. Aunque esta realidad pueda superar nuestra comprensión, la trascendencia de Dios la sobrepasa. No obstante, en medio de esta vastedad, Dios se involucra en una conversación personal con Noé, con una atención específica hacia una persona individual. Es verdaderamente asombroso que Dios se preocupe lo suficiente por nosotros como para hacernos una invitación a establecer una relación personal con él. Este Dios, capaz tanto de cataclismos como de misericordia, es el creador del agua y el artífice del arco iris en el cielo.

En una relación, intervienen más de una parte. Es esencial que Noé haga lo suyo: escuche a Dios y se esfuerce por vivir de acuerdo con lo que ha oído. Aunque Dios menciona que el arco iris es una señal para él mismo, también sirve como un recordatorio tanto para Noé como para nosotros de la importancia que tiene para Dios que estemos atentos a su voz. En la colecta de hoy, elevamos nuestras oraciones para que “en [Dios] hallemos poder para ser salvos”. Estar en comunión con un Salvador poderoso implica, en primer lugar, el acto de escuchar.

• Dios obra tanto a escala cósmica como en los detalles más pequeños. ¿De qué manera has percibido la acción de Dios en el mundo, ya sea a escala cósmica o en tu vida cotidiana?
• La llamada de Dios nos conduce a entablar una relación personal con él. ¿Cómo cultivas la habilidad de escuchar a Dios y qué acciones consideras que podrían enriquecer y fortalecer esa escucha durante este tiempo de Cuaresma?

Salmo 25:1-9

El salmista aquí articula una postura de humildad ante Dios. Él deposita “su confianza” en Dios y le pide que le muestre, le enseñe y le guíe. Se nos asegura que Dios es generoso y enseña a los pecadores y a los humildes.

Es esencial distinguir entre distintas posturas de humildad. La humildad expresada en este salmo no surge de una abnegación degradante ni de condena; humildad no es sinónimo de humillación. Esta humildad se asemeja más a la del estudiante o a la del que acepta ser guiado. Si estamos dispuestos a que se nos muestre, se nos enseñe y se nos guíe, realmente podemos seguir los caminos del Señor, que son “amor y fidelidad”. En otras palabras, tenemos la capacidad de ser lo que estamos destinados a ser, es decir, personas que “guardan su pacto y sus testimonios”. Sin embargo, la humildad necesaria se fundamenta en recordar que nuestra capacidad para seguir a Dios proviene de él, y cualquier fortaleza que poseamos es un don.

• Se nos asegura que Dios es un maestro lleno de gracia. ¿Qué puede estar enseñándote Dios en esta estación?
• El miedo y la duda a menudo nos impiden mantener una postura de humildad confiada ante nuestro Dios amoroso y perdonador. ¿Cómo has experimentado el amor de Dios, a pesar de saber que te has quedado corto o has cometido errores?

1 Pedro 3:18-22

La estación de Cuaresma constituye un momento significativo en la Iglesia para reflexionar sobre el significado del bautismo, vinculado en esta epístola con la era de Noé. Durante la época de Noé, una actitud de escucha y acción fiel en respuesta a la voluntad de Dios resulta vital para la relación con él, una verdad igualmente aplicable cuando reflexionamos sobre nuestro pacto bautismal. Así como Noé no se salvó porque fuera capaz por sí mismo de hacer frente al diluvio, sino que se salvó gracias a su relación con Dios, de la misma manera a nosotros no se nos pide ser justos por nuestras propias fuerzas. Nota que le pedimos a Dios tener “una conciencia limpia”.¡La fuente de nuestra buena conciencia está en Dios! Nuestra salvación se fundamenta en nuestra relación con Dios, en Cristo quien “sufrió… para llevarlos [a ustedes] a Dios”.

• Las Escrituras nos enseñan acerca de la relación de alianza con Dios. ¿Cuál es la naturaleza de tu relación personal de alianza con Dios, y cómo podrías reflexionar y actuar en esta estación de Cuaresma para reconciliarte cada vez más con Dios?
• Nuestra salvación se realiza en y por medio de Cristo. ¿Qué significa para ti la salvación en Cristo aquí y ahora, y de qué manera podrías proclamar esta Buena Nueva con la palabra y el ejemplo?

Marcos 1:9-15

La intensidad de la acción en estos siete versículos es sorprendente. Se presentan fuertes contrastes: los cielos se rasgan, pero el Espíritu desciende como una paloma; una voz amorosa y afirmativa proviene del cielo, mientras que el Espíritu conduce a Jesús al desierto donde es tentado por Satanás; aparecen bestias y ángeles; Juan es arrestado, pero al mismo tiempo se proclama la buena nueva. Así sucede cuando estamos animados por la obra del Espíritu en nuestras vidas.

Hace dos milenios, Jesús proclamó: “Ya se cumplió el plazo señalado, y el reino de Dios está cerca”, y nuestra fe sostiene que esto es tan verdadero hoy como lo fue en aquel entonces. Sin embargo, observen lo que añade a continuación: “Vuélvanse a Dios y acepten con fe sus buenas nuevas”. Sí, vivimos en el tiempo cumplido, pero tenemos un papel que desempeñar: estamos llamados a arrepentirnos y a creer. Ambas cosas pueden ser difíciles, y podemos sentirnos muy tentados a tomar un camino más fácil que desvíe el verdadero arrepentimiento o diluya la creencia en la buena nueva. En la colecta pedimos a Dios: “Ven pronto a auxiliarnos, pues nos asedian muchas tentaciones”. Este pasaje nos recuerda que debemos estar preparados para que la ayuda de Dios conduzca cada vez más a una acción inmediata y a una transformación profunda y duradera.

• Las tentaciones pueden adoptar diversas formas, algunas de ellas son sutiles subversiones de la fe y de la determinación de mantener una relación correcta con Dios. ¿Cómo has experimentado las tentaciones en tu vida y de qué manera te ha ayudado Dios?
• Nuestro bautismo nos transforma y nos impulsa a cambiar continuamente. ¿Cómo te está llamando Dios a la transformación hoy, en esta estación de Cuaresma?

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